Randy Wagner podría considerarse una suerte de Noé en la era moderna. El creía, tal como anunciaban algunos meteorólogos, que en el estado de Texas donde vive habría una gran inundación y, como al personaje de la Biblia, también le consideraron loco por tratar de ponerle remedio con sus propias manos.
Pero Wagner no trató de salvar a ninguna especie del diluvio ni construir un arca. Lo que él quiso hacer es proteger su casa del avance de las aguas.
Buscó en internet y encontró Aqua Dam, un tubo de goma de 120 metros de largo que se llena de agua y que al instalarse funciona como una gigante bolsa de arena rodeando la casa.
Muchos vecinos se burlaron de Randy por gastarse US$8.300 dólares en el invento. Pero como dice el dicho: quien ríe último ríe mejor.
Efectivamente, Texas sufrió recientemente una inundación histórica.
A Wager le llevó bastante llenar el largo tubo de agua y tuvo que reforzar algunas áreas con sacos de arena. Pero así logró salvar su casa tras la subida de casi 70 cm en el nivel del agua.
Sin duda habría perdido mucho más dinero y habría tenido que enfrentar mayores dolores de cabeza si no hubiera comprado la presa.
Pero Randy no presume de ello y simplemente dice que tuvo la suerte de que Dios le guiara a la hora de comprar el tubo gigante que salvo su hogar. Conoce su sorprendente historia en el video de abajo.
Por favor, comparte su increíble historia y difunde este asombroso invento que podría salvar muchas casas más en un futuro, donde parece que los fenómenos climáticos extremos desafortunadamente serán cada vez más frecuentes.