Cuando Jenny recibió la noticia de que su abuelo estaba en el hospital diagnosticado de Covid-19, toda la familia pensó que este era su final.
Pero la historia tomó otro giro inesperado. Ahora este abuelo está en su casa ¡y en pie!
Tanto Kjell, de 92 años, como su esposa, Gun Fransson, de 86, viven en Jönköping, Suecia. Los dos comenzaron a sufrir síntomas parecidos a los de una gripe a finales de marzo. Tenían fiebre alta y Kjell también tenía problemas para respirar. Fueron empeorando tanto que tuvieron que ser hospitalizados, según cuenta el periódico Aftonbladet.
– Allí confirmaron que Gun tenía neumonía y los dos dieron positivo en Covid-19, cuenta su nieta Jenny Almquist aAftonbladet.
No pintaba nada bien al principio. Gun tenía puesto un respirador y no despertó hasta cuatro días después, ahora ya está estable.
Kjell, sin embargo, a sus 92 años se recuperó rápidamente. Y ahora está en su casa y en pie. Su nieta Jenny quiso compartir su historia de esperanza en las redes sociales, y escribe en Facebook:
«Este es mi abuelo. Tiene 92 años. Su historia es un rayo de luz y ese rayo de luz tiene que conocerse. Tiene que difundirse para que muchos puedan leer su historia de esperanza. Tiene Covid-19 y ha dicho: ”¡A mí no me llevas!”. Ha estado ingresado en el hospital y ahora está en su casa».
– El sentimiento de mirarlo, tomar su mano y sonreír fue sencillamente mágico, cuenta Jenny Almquist.
También la abuela de Jenny, Gun, se está recuperando.
– Le han quitado el respirador y la sonda. Ya se ha levantado de la cama y puede ir en silla de ruedas, y tiene 86 años, cuenta Jenny a Aftonbladet.
Qué preciosa historia de esperanza.
Compártela para dar esperanza. De esta, se puede salir.