El sábado pasado, Army Pfc. Glendon Oakley estaba de compras en Walmart en El Paso, Texas, cuando de repente, un niño entró en la tienda y gritó que había un tirador.
Nadie dio importancia a lo que decía el niño, pero más tarde Oakley se dio cuenta de que el niño tenía razón.
”Escuché dos disparos y mucha gente comenzó a correr gritando», contó Oakley a CNN.
Los terribles tiroteos masivos que ocurrieron el sábado en El Paso y Dayton, Estados Unidos, dejaron a toda la nación y al mundo en estado de shock. Las imágenes desgarradoras que hemos presenciado y las historias que hemos escuchado son difíciles de creer.
Pero a pesar de esta locura devastadora, se han producido historias de solidaridad y muchas personas se han ayudado mutuamente, incluso hay personas que han arriesgado sus vidas por gente completamente extraña.
Y un ejemplo de estos es Army Pfc. Glendon Oakley.
Oakley, un especialista en logística automatizada del ejército, regresó de Kuwait hace cuatro meses, pero el fin de semana pasado se encontró armado una vez más, sosteniendo su propia Glock mientras intentaba correr hacia la salida de la tienda.
Según Task & Purpose, Oakley encontró a decenas de niños llorando en una de las áreas de juego del centro comercial, gritando y buscando a sus padres.
«No me lo pensé dos veces. Agarraré a cuando más niños pude y salí corriendo hacía la salida», comentó.
Oakley y otro hombre comenzaron a agrupar a los niños. Había unos 13 niños, pero Oakley solo podía llevar a tres…
«Estaba concentrado en los niños, no estaba preocupado por mí. Así que bajé la cabeza y corrí lo más rápido que pude», dijo.
«Estaban muy nerviosos cuando los tenía en mis brazos. Intentaban escaparse pero yo intentaban mantenerlos lo más apretados posible. Son niños, y por lo tanto no entienden lo que está sucediendo».
De inmediato Oakley se encontró con la policía, que le estaban apuntando a él a los niños con sus armas.
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Dijo que dejaba a los niños y sacó su celular «si me disparaban y grabé mientras corría.»
Oakley reconoció temer por su vida cuando el tirador comenzó a abrir fuego en Walmart, matando al menos a 22 personas y mandando a todos las personas presentes a un centro comercial cercano.
Pero él actuó como creía que debería actuar, según él mismo. Y no quiere ser el centro de atención de nada.
«Comprendo que fue heroico, y me tratan como si fuera un héroe, pero no lo hice por este motivo…», contó a KFOX mientras rompió a llorar.
Pfc. Glendon Oakley, a soldier stationed at Fort Bliss, helped children to safety inside Cielo Vista Mall after a gunman opened fire at the nearby Walmart.
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«Me centré en los niños, no los podía dejar y no encontraban a sus familias. Me dolía como si fueran parte de mí mismo. Ni siquiera conocía a las personas que murieron, ni a los niños que me llevé…Quería encontrar a sus familias perdidas y quería que las familias encontrarán a sus hijos porque el objetivo no era yo».
Gracias por salvar a esos niños y por llevarlos a un sitio seguro. Te lo agradecemos de corazón.
Este héroe, Glendon Oakley, debe ser reconocido en todo el mundo por su valentía. ¡Gracias! ¡Compartamos – vamos a hacerlo famoso!
