Bernie y Diane Lierow tienen cinco hijos y siempre habían soñado ampliar la familia.
Cuando sus hijos crecieron y abandonaron el hogar, la pareja se dio cuenta de que todavía les quedaba amor para ofrecer a algún niño que lo necesitara.
Decidieron adoptar a una niña una vez que cuatro de sus cinco hijos ya adultos decidieron mudarse y abandonar el hogar familiar.
Después de reflexionar un tiempo decidieron abrir su casa a otro niño menos afortunado.
Pero cuando finalmente decidieron adoptar, sus vidas cambiarían totalmente a causa de la decisión adoptada – basada en una simple foto.
Bernie y Diane Lierow comenzaron a trabajar con una agencia de adopción local y muy pronto participaron en un evento donde iban a conocer a su posible hijo adoptivo.
Aunque había muchos niños allí, Diana no podía quitar los ojos de una foto en blanco y negro de una niña que no pudo asistir.
”Me sentí totalmente atraída por ella,” dice Diane.
La pareja preguntó por la niña y la agencia les advirtió sobre ella. Los organizadores no respondieron a la curiosidad de Diane por la niña de la manera que ella hubiera esperado.
“Todo lo que me dijeron fue»– definitivamente no la querrás», recuerda el padre Bernie.
”Una de las mujeres le dijo a mi mujer: Hay algo raro en ella, esta niña no es adecuada para ser adoptada,» dijo Bernie.
A pesar de la advertencia de que la niña de la foto no era buena para adoptar y que había algo rara con ella, la pareja persistió en su decisión.
Pero la pareja no iba a darse por vencido tan fácilmente, y se reunieron con el asistente social que trabajaba con la niña. ésta les contó una historia que rompió el corazón de Bernie y Diane. Aprendieron la terrible verdad sobre el inimaginable abandono que la niña había sufrido.
Descubrieron que la pequeña había crecido en unas condiciones impensables.
Danielle Crockett era más conocida como «la niña de la ventana».
En el año 2005 la policía recibió una llamada de una vecina preocupada. Ésta les dijo que algo extraño y terrible sucedía en la casa de al lado.
La vecina había visto una cara pálida y delgada que no reconocía, mirando por la ventana.
El detective Mark Holste y su compañero llegaron a lugar de los hechos. Lo que vieron les ha perseguido durante años.
«Fue el caso de negligencia más escandaloso que he visto jamás», explica Holste.
“Parecía que estabas caminando sobre cáscaras de huevo. No se podía dar un paso sin aplastar cucarachas».
Holste encontró a Danielle abandonada en la parte de atrás de la casa sobre un colchón sucio. Su habitación era del tamaño de un armario y estaba llena de pañales sucios.
Los años de abandono y las terribles condiciones de vida habían dañado gravemente a la niña de 6 años.
Danielle no podía hablar ni comer alimentos sólidos; Estaba cubierta de piojos y pulgas. Ella pesaba 21 kilos cuando Mark Holste la encontró.
“La madre dijo: estoy haciendo todo lo mejor que puedo,’” Holste comentó a Tampa Bay Times.
“Le dije: ¡todo lo que puedes, ni hablar!
Alrededor del 85 por ciento de nuestro cerebro se desarrolla dentro de los primeros 5 años de nuestras vidas, explica la psicóloga Kathleen Armstrong, que examinó a Danielle.
La niña tenía la capacidad mental de un bebé, a pesar de que cumpliría pronto 7 años.
El médico calificó su condición de «autismo ambiental». Y ello porque había estado privada de todo contacto humano durante mucho tiempo. Simplemente había sido aislada y nunca había aprendido a interactuar con otras personas.
A la madre de Daniella se le retiró de inmediato la custodia de la niña. Ésta estuvo 6 meses en un hospital recuperándose antes de que fuera dada de alta.
Cuando Bernie y Diane Lierows leyeron todo esto en sus informes, estaban desconsolados.
«Me puse a llorar al leer las condiciones en las que había vivido la pequeña», dice Diane.
Pero aun así ellos sentían que Danielle debía formar parte de su familia.
Y la llegada de Danielle a la familia no fue un camino de rosas.
«No sabíamos si había comido alguna vez con cuchillo y tenedor», dijo Diane.
«Y comienzas a pensar: no sé cómo progresará esta niña»
Danielle sufría colapsos 7 y 8 veces al día y odiaba salir a la calle. Gritaba con todas sus fuerzas y se tiraba al suelo, comentaron sus padres adoptivos en una entrevista en el año 2009.
La comida era un tema complicado con Danielle. Comía hasta casi ponerse enferma ya que ella no había aprendido a controlar su apetito tras pasar hambre durante los primeros 6 años de su vida.
Pero aún así Diana y Bernie la querían como su hija que era.
Superadas todas las expectativas
Con mucho amor y ánimo, ¡Danielle comenzó a progresar de manera increíble!
Cosas tan triviales como lavarse los dientes, las manos e ir sola al baño, fueron avances monumentales para Danielle. Y lo hizo todo gracias al apoyo de la familia Lierows.
”Danielle ha superado todas las expectativas que los expertos tenían sobre ella en el momento en el que la encontraron,» dijo Diana a CBN en el año 2012.
«Los pasos pequeños son grandes pasos para alguien discapacitado,» explicó Bernie en 2014.
«Ha aprendido a hacer cosas que creímos nunca aprendería.”
El habla sigue siendo un área desafiante para Danielle, pero normalmente ella saluda a Bernie con un «hola papá», e incluso ha dicho «te quiero» a sus padres.
Tras el maltrato recibido por su madre biológica, Danielle es muy cautelosa con las mujeres y las figuras maternas. Le ha llevado mucho tiempo poder socializar con otros, pero está mejorando.
«Ella sigue siendo agresiva con la comida», dijo Bernie a OWN en 2014.
Sin embargo al ver los avances conseguidos por Danielle hasta el momento, la familia ve un futuro brillante para ella y tiene grandes esperanzas en que siga consiguiendo objetivos.
”Si pudiera llegar a formar parte de la sociedad ya sería todo un logro,» dice Bernie.
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Aunque esta historia comenzó trágicamente, el futuro ahora parece mucho más brillante, ¡gracias al amor y la determinación de Bernie y Diane Lierow!
Si alguna vez hubo dudas de que el amor pudiera conquistar cualquier cosa, Bernie y Diane Lierow lo demostraron cuando se hicieron cargo de Danielle a pesar de las advertencias.
La quieren como si fuera suya a pesar de todos los retos que supone y nunca abandonan apoyándose en Dios para continuar.
Esta historia también nos demuestra que ángeles entre nosotros, y a veces gente, como los Lierows, toman decisiones que resultan ser el milagro que alguien ha pedido.
Comparte esta historia para desearle a Danielle mucha suerte en su futuro y para elogiar a estos dos padres que han mostrado que el amor verdadero y dedicación lo puede cambiar todo.