Una familia en Florida está pasando por algo inimaginable: tres miembros luchan actualmente contra el cáncer.
«Es difícil, física y emocionalmente, pero las oraciones nos ayudan a continuar», dijo Benoit Desclefs a FOX30.
En 2015, a Kathy Desclefs le diagnosticaron un linfoma no Hodgkin. Benoit se enteró de que tenía un tumor cerebral inoperable ese mismo verano, y el hijo de 17 años de la pareja, Luke, fue diagnosticado también con linfoma de Hodgkin en octubre.
Era demasiado, especialmente cuando se trataba de Luke. Fue ya el colmo”, dijo Kathy.
Los tres miembros de la familia tienen diferentes niveles de cáncer y diferentes pronósticos. Kathy, que ha estado recibiendo tratamiento de forma intermitente durante varios años, tiene un cáncer poco frecuente, por lo que sus médicos no están seguros de cuánto tiempo le queda por vivir.
A Benoit le dieron aproximadamente 12 años, y el pronóstico de Luke es bueno, pero aún se desconocen ciertos aspectos de su cáncer. Esperan saber algo más cuando le hagan una tomografía.
Además de luchar contra el cáncer, los Desclefs luchan por mantener su negocio familiar activo.
Los Desclefs poseen un restaurante en el centro de Jacksonville, Florida, pero entre los costes médicos y con Benoit y Jack todavía recibiendo tratamiento, les ha sido extremadamente difícil mantener su negocio en funcionamiento.
Según News 4 JAX, los Desclefs han tenido que contratar ayuda extra para que Kathy continue trabajando en el restaurante – y están pensando en poner el negocio en venta.
“Estamos esperando a que Dios nos eche una mano porque todo esto es demasiado», dice Kathy.
Mis plegarias van para la familia Desclefs. Ya es terrible que una persona en la familia sufra cáncer, así que no puedo ni imaginarme que fueran tres miembros los que afrontaran esta lucha.
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