Para la familia Legge la ha vida ha sido una montaña rusa en los últimos años.
Su hija Evelyn tenía tan de sólo 10 meses cuando, el 21 de mayo de 2014, se fue para siempre. La pena de Adam y Beth fue indescriptible.
El día en que hubiese sido el tercer cumpleaños de Evelyn, la familia estaba en Coney Island, en un parque de atracciones para celebrar la memoria de su hija. Entonces recibieron un inesperado mensaje de teléfono.
Un amigo de la familia, Dawn, se preguntaba si Adam y Beth estarían dispuestos a adoptar.
La pareja había pensado en la adopción, pero no estaban seguros. Después de intercambiarse unos cuantos mensajes, decidieron ir a conocer al pequeño Elijah.
De camino al hospital circulaban detrás de otro vehículo en cuya placa de matrículo ponía EVY, el diminutivo de Evelyn.
Ya en el hospital descubrieron que la enfermera a cargo del pequeño Elijah se llama Eevelyn también. Y se enteraron de que el niño había nacido, tres años después, pero exactamente el mismo día que su hija Evelyn.
La familia interpretó todas señales como un mensaje del cielo diciéndoles que Elijah va a ser su hijo, y comenzaron el proceso de adopción.
La familia Legge consiguió primero la acogida temporal del niño, y poco después se realizó la adopción.
Beth cuenta: ”Es fantástico, la vida parece un aguijero negro, pero uno cree en Dios y eso ayuda».
Hubo muchas sonrisas en la sala el día que el juez ratificó que Adam y Beth eran ya los padres de Elijah. El día fue muy especial porque la familia sintió que Evelyn estaba allí con ellos en ese momento.