Los padres a menudo son acusados de ser demasiado sobreprotectores con sus hijos, sobre todo cuando no dejan a nadie que abrace, toque o bese a su bebé.
Pero la labor de una madre es proteger a su hijo y evitar que él o ella caiga enfermo, ya sea por un resfriado o algo más peligroso.
Algunos todavía tildan a determinadas madres como "locas" si protegen en exceso a sus criaturas.
Sin embargo, una madre llamada Amy Stinton ha difundido un recordatorio asegurando que nunca se es demasiado sobreprotector en lo que a bebés se refiere.
Amy nunca permite a extraños o conocidos besar a su bebé, Oliver, y es muy protectora con él.
Pero alguien en su círculo próximo besó a su niño de 14 meses con un herpes en la boca.
El resultado es que Oliver ha sido contagiado con una enfermedad con la que tendrá que vivir el resto de su vida.
Ella no culpa a nadie, pero apeló a Facebook para advertir a otros sobre los peligros potenciales.
En Facebook ella dijo:
«Esto es lo que pasa a los bebés cuando entran en contacto con un herpes bucal. Oliver ahora tiene el virus del herpes y lo tendrá toda su vida. Piénsenlo antes de besar a un bebé la próxima vez».
Según Little Things, el bebé Oliver quedó completamente cubierto de llagas después del beso y, tras acudir urgentemente al médico, le dieron el diagnóstico de herpes.
Oliver pasó cuatro días en el hospital con un goteo intravenoso, así que claramente la gente debe tener más cuidado.
¿Tienes amigos con hijos? ¡Asegúrate de compartir esta historia con ellos para que sepan que deben tener cuidado!