Esta perra se encontraba en un estado lamentable y el veterinario pensó que lo mejor sería sacrificarla. Pero algo le hizo cambiar de opinión y ocurrió el milagro.
Andy Mathis es un veterinario de Georgia, en Estados Unidos, con un corazón de oro.
Recientemente, cuando se disponía a salir del trabajo, una mujer le llamó. Se había encontrado a una pitbull hambrienta en una calle polvorienta. Como nadie podía ocuparse del pobre animal él se lo quedó.
El perro estaba tan mal que pensó que lo mejor sería sacrificarlo, pero buscó consejo y también en su corazón.
Decidió cuidarlo y ahora su salud mejora día a día. Lee la historia completa a continuación.
Aquí está la historia de Andy:
“El viernes 29 de enero en la noche alguien llamó tras haberse encontrado un perro abandonado en muy mal estado en una calle polvorienta en el campo. No podían quedársela, no podían permitirse el tratarla, pero también dijeron que no podían tan sólo dejarla ahí a su suerte. ¿Qué podemos hacer? Preguntaron”.
“Les dije que la trajeran, que quizás tendría que hacerle una eutanasia, pero necesitaba verla antes y a partir de ahí decidir”.
Cuando llegó, Andy dice que la vio “demacrada, desnutrida (9 kg), deshidratada, hipotérmica, anémica y con un prolapso vaginal.
Así que buscó consejo en Facebook:
“Hola a todos, necesito vuestro consejo. Mi yo práctico dice que tendría que dormirla, pero mi lado veterinario quiere darle una oportunidad”.
Sus amigos respondieron: “Inténtalo, sobre todo si ella tiene la voluntad de vivir. Inténtalo”.
Y eso es lo que Andy hizo.
Días después, el perro, que desde entonces pasó a llamarse Graycie C por su color, comía, estaba mucho más relajada, ganó peso y sus presión sanguínea mejoró.
“Ha estado comiendo los últimos dos días, pero está incómoda, a no ser que me vaya de la habitación, así que hoy decidí quedarme en la jaula con ella”.
Andy compartió un video donde se sienta con Graycie C en su jaula para animarla a comer el desayuno. Se la ve mucho mejor que cuando llegó, pero todavía le cuesta confiar.
Él comió en un cuenco de perro para demostrarle que son iguales. Gracias a sus cuidados y a tratarla con dignidad y respecto, poco a poco fue fiándose de él.
Andy continúa reportando la evolución deGraycie C en la página de Facebook del centro donde trabaja, el Granite Hills animal care.
“Con suerte aprenderá a confiar en la gente rápidamente, y estará lista para entrar en un nuevo hogar muy pronto”, dice Andy.
Puedes ver el video completo abajo, que ya tiene 40.000 likes y ha sido compartido más de 70.000 veces en Facebook.
Esta historia demuestra que no hay que tirar la toalla y que los animales son como nosotros, con amor y mimos podemos llegar muy lejos.
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