Catherine Svilicic había justo adoptado un dóberman que había sido abandonado por su anterior dueño. Pero siempre hay que ser cuidadoso a la hora de incorporar un nuevo miembro peludo a una familia con niños. En este caso, el perro era tan bueno con la hija de 17 meses de Catherine, que le dejaban jugar con ella en el jardín, bajo su vigilancia.
El perro, llamado Khan, llevaba con su nueva familia 4 días y parecía integrarse perfectamente. Pero entonces algo terrible ocurrió.
Como padre o madre, uno siempre quiere proteger a su hijo contra todos los posibles peligros, así que Catherine se asustó cuando vio que el perro se volvió con agresividad hacia su hija. Pero pronto se dio cuenta de que no era el perro de lo que debía tener miedo.
Era el mes de ocutbre de 2007 cuando Catherine Svillcic estaba en el jardín con su hija de 17 meses.
En poco tiempo la familia había dado la bienvenida a dos nuevos miembros, además de su hija Charlotte, Catherine había dado la bienvenida en su hogar a un perro abandonado.
Khan, un dóberman, había sido salvado de unas condiciones de vida terribles y llevaban unos días en su nuevo hogar.
Al parecer su dueño anterior lo había maltratado y le había dado muy poca comida.
Y cuando Khan solo llevaba unos días en la casa, tuvo lugar un impactate suceso.
Catherine tenía un ojo puesto en su hija Charlotte cuando la niña jugaba con el perro, según cuenta el periódico local australiano Adelaide Now. Ella solía soltar al perro y lo dejaba jugar en la hierba, y fue entonces cuando presenció algo terrible.
«Khan se puso muy agresivo y golpeó a Charlotte. Trató de empujar a la niña, pero no pudo, así que mordió por detrás su pañal y la lanzó más un metro», cuenta Catherine Svilicic.
La madre, como es normal, se alteró mucho al ver el comportamiento del perro, pero entonces miró al suelo y vio algo que se metía bajo la casa, una serpiente.
No se había dado cuenta de que había una serpiente en la hierba cuando el perro apartó de allí a la niña, pero eso era precisamente lo que había hecho el perro, alejar a la niña del peligro.
Inmediatamente después, el perro lanzó un fuerte aullido y se apartó.
Khan se había sacrificado para salvar a la niña de la serpiente, se trataba de una serpiente de las más venenosas.
Entonces llevó rápidamente al perro al veterinario, antes de que fuese demasiado tarde. Allí le pusieron a Khan una inyección con antídoto contra el veneno y consiguió sobrevivir.
Si no hubiese sido por la rápida intervención del perro, la serpiente hubiese mordido posiblemente a Charlotte.
Aunque Khan solo llevaba unos días en nuevo hogar, ha demostrado estar preparado para defender a la familia. ¡Todo un héroe!
Sabemos que todos los perros son fieles, pero esta historia demuestra lo buenos protectores que pueden ser, llegando incluso a sacrificar su propia vida por nuestro bien.
No creo que haya muchas personas dispuestas a dar tanto. ¡Muchos ‘me gusta’ para este héroe peludo!