El gato Toldo visita la tumba de su dueño cada día y deja pequeños regalos.

Dicen que los perros son los mejores amigos de los humanos y que son sumamente leales, una de las historias más bonitas que conozco es la del akita japonés Hachikō que era muy leal a su dueño. Hachikō le acompañaba a su dueño todas las mañanas a la estación de tren cuando él iba al trabajo, también lo recibía en el mismo sitio al final del día, pero un día su dueño no volvió, le había dado un infarto y falleció. Pero Hachikō siguió esperando a su dueño por la estación del tren por nueve años. También los gatos son a veces muy leales y se pueden desarrollar lazos fuertes entre ellos y sus dueños. La primera vez que leí la historia sobre el gato Toldo me hizo pensar en el perro Hachikō, no me deja de sorprender qué fuertes pueden ser los lazos entre un ser humano y sus mascotas, independientemente del animal que sea.

Toldo es un gato gris y blanco que vive en Montagnana en el norte de Italia y tiene seis años y pico, la primera vez que el gato se volvió famoso fue en 2013 cuando él tenía tres años.
Toldo fue adoptado por el italiano Iozzelli Renzo cuando tenía solamente tres meses, la esposa Ada cuenta que después de allí se desarrolló un lazo muy fuerte entre los dos, según Huffington Post.

El 22 de septiembre 2011 falleció Iozzelli Renzo a los 71 años de edad, cuando enterraron al señor su gato siguió el ataúd todo el camino desde la casa hasta el cementerio, escribe Huffington Post.

Ada fue otra vez a la tumba la mañana siguiente, allí vio una rama de un árbol de acacia y Ada pensó directamente que había sido el gato, luego el mismo día el hijo de Iozzelli Renzos visitó la tumba y encontró a Toldo vigilándola.

El gato siguió visitando la tumba de su dueño cada día y Toldo había dejado pequeños obsequios por la tumba durante más de un años cuando Huffington Post escribió sobre el gato en 2013, los obsequios consistían en hojas, ramas, copas de plástico y servilletas de papel. Probablemente el gato quería mostrar su lealtad a su dueño y le llevaba lo que encontraba en su camino.

– Hoy fui al cementerio con Toldo, de regreso me contaron que el gato ya había ido a la tumba temprano esa misma mañana, dijo la viuda Ada al periódico italiano Corriere Fiorentino, según Huffington Post.

Los vecinos también han visto a este gato fiel caminando por el cementerio en las mañanas.

– Mi esposo quería mucho a su gato, Renzo amaba los animales, parece que Toldo está agradecido por el buen trato, es un gato muy especial y es difícil no quererlo, dice Ada según Huffington Post.

Who said dogs are the loyal ones?!

Posted by The Huffington Post on Sunday, May 15, 2016

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