El hábitat natural de un oso polar es el Ártico donde hace frío y donde tienen acceso directo al agua, lamentablemente no era así como vivía el oso polar Arturo, que estaba sufriendo en asfalto y calor. Tuvo que vivir la mayoría de su vida en cautiverio en un zoológico en Argentina y su situación causó ira en todo el mundo. Ahora nos ha dejado para siempre.
A Arturo lo solían llamar el animal más triste del mundo, y vivía bajo condiciones que ningún animal merece. Los defensores de los animales decían que estas condiciones lo estaban volviendo loco y que estaba mostrando varios señales de estrés.
Personas de todo el mundo protestaban por las condiciones bajo las que vivía Arturo, cientos de miles de personas firmaron una lista de protesta para salvarlo de ese agujero de cemento en Argentina donde tuvo que vivir su vida, un lugar en el que en el verano se puede llegar a 40 grados. La lista de protesta era un intento para llevarlo a un zoológico en Canadá, donde el clima y las temperaturas son mucho más agradables para un oso polar.
”Cada parte del oso polar está adaptada para vivir en nieve y para moverse sobre áreas grandes, durante 30 años Arturo estaba privado de vivir así”, dice Barry MacKay, una de las personas que intentaron organizar un traslado para Arturo, a The Dodo.
Pero el zoológico rehusó dejarle ir al oso polar, y ahora es demasiado tarde, Arturo ha falleció.
”Con gran tristeza hemos de informaros que nuestro querido Arturo ha dejado de luchar para sobrevivir y ha fallecido hoy. Arturo, espero que supieras de todas las personas en todo el mundo que te querían y que lucharon por ti y que trataron tanto de concientizar a otros sobre tu situación”, decía la página de Facebook ”Free Arturo”, y aãndían:
”Ahora estás libre, Arturo.”
¡Qué en paz descanses, Arturo! Ayuda a compartir la historia de Arturo para que nadie olvide de las condiciones horribles bajo cuales muchos animales viven en este mundo. ¡Juntos podemos cambiarlo!
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