La perspectiva de traer niños a este mundo me asusta cuando escucho historias como esta. La profundidad de la depravación que cometen algunos humanos nunca puede ser subestimada y, a pesar de todos los avances que hemos hecho para llegar a donde estamos como especie, opino que todavía hay demasiado horror en el mundo.
Y si alguien tiene alguna duda que solo eche un vistazo a la historia de un niño, Jordan, que con solo 5 años de edad, en el año 2014, estuvo a punto de morir. Es importante puntualizar desde un principio que esto no fue por culpa de un terrible accidente o de una enfermedad incurable que tuviera la desgracia de sufrir.
No, el peligro que sufrió Jordan proviene de gente que se suponía debían ofrecerle todo el cariño y la confianza del mundo. Una gente que debía asegurarse de que viviera la mejor de las vidas posible: sus padres.
Jordan nació de una de las muchas relaciones de su padre. Tenía siete hermanastros, pero fue él quien recibió los castigos más inefables de su padre, Brad Bleimeyer.
El abuso comenzó poco a poco, pero en poco tiempo se intensificó hasta el punto de que Jordan fue golpeado, abusado verbalmente, sufrió inanición y en ocasiones perdió el sentido.
TexasBradley Bleimeyer and his wife Tammi Bleimeyer have been charged with felony child endangerment after police…
Posted by Injustice Investigations News on Monday, March 31, 2014
Bleimeyer y su esposa, Tammi, encerraron a Jordan en un armario debajo de las escaleras donde sobresalían los cables y clavos de las paredes. Intentó escapar más de una vez, pero los padres colocaron un candado en la puerta para que permaneciera encerrado todo el tiempo que ellos consideraban.
Dos de los hijos mayores de Tammi, Cody y Allison Frank, eran conscientes de que el trato que sus padres tenían hacía su hermano era incorrecto. Y aunque Cody solo tenía 16 años, trató de alertar a los demás sobre el abuso. Desgraciadamente nadie tomó sus palabras en serio.
Según The Sun, Cody explicó: “La policía había estado en nuestra casa varias veces. Todos los agentes me dijeron que no podían hacer nada al respecto».
«Los profesores no estaban seguros de cómo proceder, nadie podía ayudarme en ese momento».
«Recuerdo que los oficiales de policía estaban justo en frente de nuestra puerta principal y les pedí que entraran a ver qué pasaba y me dijeron que no podían porque era menor de edad y no era el propietario de la casa». Estaban literalmente en nuestra puerta y yo estaba pidiendo ayuda y no pudieron hacer nada».
Sin embargo, Cody se negó a rendirse. Él y su hermana defendieron a Jordan, aunque fueron amenazados por sus padres y recibieron castigos físicos y verbales por sus acciones.
Entonces, un día de marzo de 2014, Cody ya no podía más. Entró en la prisión donde estaba encerrado Jordan y se encontró con una pesadilla.
«El día que abrí ese armario, vi a Jordan en un estado deplorable. Nunca lo había visto así», explicó.
«Había tenio una enorme discusión con Brad y sabía que me encontraba en problemas. Los dos adultos estaban fuera de casa y vi la oportunidad de abrir el armario y sacar a Jordan.
“Pero lo que me encontré fue verdaderamente terrible – estaba con su pañal, no tenía ropa. Su cara estaba llena de moratones y heridas, marcas por todas parte. Por la boca le salía espuma. Nunca en mi vida he visto nada peor.»
«Me detuve un momento y luego me asusté. Si no lo hubiéramos sacado ese día, no creo que hubiera sobrevivido».
«Levanté a Jordan y se lo entregué a mi hermana Allison para que ella pudiera cuidarlo y consolarlo. Salí y llamé a mi madre y a Brad para que me contaran que era todo eso. Ambos se dieron cuenta de que había abierto la puerta del armario. Dijeron que no tenía nada que hacer allí, que no tenía nada que ver conmigo.
«En ese momento, las cosas se calentaron entre Brad y yo, y nos empezamos a empujar mutuamente. Yo estaba tratando de llamar la atención al máximo. Sabía que en este punto no había vuelta atrás. Mi madre me había confiscado mi teléfono, pero tenía un teléfono prepago, así que llamé a la policía. Mientras tanto, mi madre estaba recogiendo a todos los niños y sacándolos de casa.
Allison, que tenía 14 años en ese momento, dijo: «Recuerdo que se cayó, lo levanté, lo sostuve en mis brazos. Era terrible». Era como si no estuviera sosteniendo nada, era tan liviano. No parecía que sostuviera a un niño, para nada.
«Estaba tan pálido y su mejillas estaban hundidas y olía fatal, era horrible». «No lo había visto en casa durante una semana. Jordan estaba muy asustado y no sabía lo que estaba pasando».
Y se hizo justicia
Finalmente se hizo justicia. En diciembre Tammi Bleimeyer fue sentenciada a 28 años de cárcel. Tanto Cody como Allison testificaron en su contra.
Brad Bleimeyer, por otro lado, fue sentenciado a 15 años de cárcel. A los dos padres se les quitó la custodia y fueron reubicados con familias de acogida.
Gracias a la valentía de Cody y Allison, Jordan sobrevivió a la muerte por culpa de personas que se suponen deben quererlo incondicionalmente. Cody y Allison – incluso en su tierna edad: sabían lo que tenían que hacer y lo hicieron sin inmutarse.
Jordan vive ahora con su madre biológica, en un lugar seguro. Está feliz disfrutando de una infancia todo lo normal posible después de lo que ha pasado.
Por favor comparte esta historia para advertir de estos horrores y para elogiar a aquellos que ciertamente salvaron su vida.