A veces más que la edad, lo que nos limita es cómo espera la sociedad que nos comportemos o vivamos cuando llegamos a cierto estadio de la vida.
Por suerte, hay personas en este mundo que desafían estos paradigmas y demuestran a todos que la edad no es nada más que un número.
Uno de estos casos que me hacen sonreír de satisfacción es el de Sara Vallejo, una señora de 80 años que se ha atrevido a hacer lo que muchos jóvenes ni se atreven a soñar: vender todas sus pertenencias y viajar por el mundo.
Cuando Sara Vallejo, una mujer de 80 años con tres hijos, tres nietos y un bisnieto anunció que iba a vender todas sus pertenencias e irse de viaje en autocaravana nadie le creyó.
A medida que pasaban los meses después de anunciar sus planes, esta mujer de Tucumán, en Argentina, demostró que hablaba muy en serio.
Ella se define como una aventurera y ciudadana del mundo, y por supuesto no estaba dispuesta a renunciar a su pasión por viajar debido a su edad.
Vendió todo
Dicho y hecho, Sara vendió su casa y subastó casi todas sus pertenencias. Con todo ello se compró una autocaravana y se lanzó a la carretera rumbo a Brasil.
A esta profesora de inglés jubilada, que trabajó de mil cosas en su vida, le gusta improvisar, vivir el presente y dejarse sorprender por todo lo que va encontrando a su paso.
“El viaje se va haciendo al andar, no sé ni adónde vamos a salir mañana a la mañana”, dijo al diario argentino La Nación.
Por el momento, el primer destino de Sara es Joao Pessoa, una ciudad al norte de Brasil donde vive su hija, con la idea de pasar juntas las fiestas.
100 dólares
Ya lleva dos meses de viaje y logra pagar la gasolina, unos 100 dólares cada dos días, gracias al dinero que consigue reunir de donativos a través de redes sociales.
No es el primer viaje de Sara. Esta anciana es una viajera empedernida que ha recorrido medio mundo en todo tipo de medios de transporte.
La idea de la autocaravana le vino cuando un amigo le dijo que era lo único que no había probado, entonces aceptó marcarse ese desafío.
“El punto de inflexion fue el desapego de las cosas”, cuenta la anciana. “Si no tenés un proyecto por delante, vivir se convierte en una pesadilla”.
Ahora lleva más de dos meses viajando y ha recorrido 12.000 km recorridos Salvador de Bahía.
A lo largo de la ruta ha admirado las hermosas playas de Uruguay y visitado amigos en Brasil hasta llegar a las costas de Salvador.
Tomar la decisión
¿Qué hay que tener para animarse a hacer un viaje en autocaravana? Le preguntan.
No duda en contestar: “Un espíritu positivo y dispuesto, una relativa buena salud, y después tomar la decisión”, asegura.
“Para mí la cuestión es vivir cada día como si fuera el último, pero vivirlo, absolutamente vivirlo”.
¿Te animarías a embarcarte en una aventura así? ¡Déjanos tu opinión en el apartado de comentarios! Y comparte la increíble historia de esta incansable e inspiradora aventurera.
